Un día unos
locos recorrieron las calles de una gran ciudad europea disparando a diestro y
siniestro a todas las personas que se encontraban por ahí. La suerte, la
casualidad, la sinrazón, hizo que más de cien personas perdiesen la vida. Los supervivientes,
obviamente, se enfadaron, y en respuesta a eso, el país afectado decidió
bombardear el país de procedencia de los locos, muriendo otros cientos o miles de
personas allí, civiles de allí, inocentes de allí. Los supervivientes del país receptor
de las bombas, obviamente se enfadaron, y decidieron responder de la forma que
ellos pueden: más locos recorriendo más calles de más ciudades europeas matando
a más civiles inocentes. De nuevo, los supervivientes de esas matanzas en
Europa se enfadaron, y decidieron responder con más bombardeos en el otro país.
Más muerte y destrucción en aquellos lugares que provocó más enfado, claro, y
los supervivientes se motivaron aún más en dar la vida por su Estado Islámico,
pues era atacado inmisericordemente por los europeos, así que volvieron a
responder con sus formas: Alá es grande y les dice, les ordena, con esos
bombardeos recibidos, que vayan a Europa a matar a más infieles. Y van. Y
matan. Y los europeos, enfadados de nuevo, volvieron a responder con sus
formas: la democracia les dice, les ordena, con esos asesinatos recibidos, que
vayan a Raqqa a bombardear terroristas (y lo que haya cerca). Y así en una
suerte interminable de odio y destrucción que se retroalimenta infinitamente.
La violencia sólo engendra violencia, es una máxima que nos enseñaron desde pequeño, probablemente los mismos mayores que ahora deciden seguir engendrándola. Eso lo sé yo, tú, él y el gobernante de turno. La historia está llena de ejemplos que nos dicen que los bombardeos indiscriminados solucionan tantas cosas como los tiroteos indiscriminados: nada. ¿Por qué se sigue haciendo? ¿Por qué lo seguimos viendo inevitable? ¿Es imposible dejar de comprar el petróleo con el que se han hecho y que sostienen su financiación? ¿Es imposible dejar de venderles las armas que luego van a utilizar contra nosotros? ¿Es imposible establecer vínculos que hagan atractivo para los ciudadanos de aquellos lugares la relación con nuestra parte del mundo? ¿Es imposible pedir que este tipo de conflictos se aborden de manera global y centrada en sus verdaderas causas? ¿Es imposible pensar que allí, al igual que hay tantos hijos de puta como aquí, también existen mujeres, niños y hombres que nada tienen que ver con la violencia?
Estamos acostumbrados en medicina a que una pastilla nos quite los síntomas de la enfermedad, pero no las causas, y hemos exportado esa lógica a los problemas sociales. Los bombardeos son sólo analgésicos que enmascaran el dolor de un instante, pero que no abordan la enfermedad en sí.
Como siempre, magnífico... Pero el terrorismo no es forma de protestar por la razón de nada ni de nadie y, desgraciadamente, para acabar con un ejercito de locos, no bastan las soluciones que no siempre tienen que partir de los mismos... La solución debe partir del corazón de cada cultura, porque la cultura ajena, no les convence... Nadie va a su mundo a atacarlos a traición sin miramientos.... pero los terroristas lo hacen dentro de su cultura y fuera de ella... No se puede desestabilizar un mundo ajeno, donde todos desean vivir (por algo será, a pesar de todas las incogruencias y los abusos) desestabilizando a su vez el resto del mundo... Esto no es fácil y si las personas no tienen respeto por la vida de los demás, naturalmente, algo tendremos que hacer para que no continúen sus andanzas aquí y allá... Siempre ha sido así, porque el mundo ideal no existe y, si a mi casa entra alguien a violarla, yo no voy a dar al violador un... "entiendo lo que haces porque yo soy así, y tu de otra manera... Porque yo tengo y tu no... porque yo he pecado y tu no...".... El me ha agredido directamente...; yo a él, a lo mejor, inconcientemente, pero eso ni lo disculpa, ni puede ser obviado tan facilmente... La mente humana aquí y en Pequín reacciona como reacciona... Y una gran mayoría no puede ser dominada continuamente por una minoría que piensa y actua de forma muy distinta a esa mayoría... Normalmente, las leyes, las normas... se crean para beneficiar a las mayorías... Al menos, antes era así, aunque se manipule muchas veces, se violen otras muchas y se abuse continuamente de las posibilidades de cada quien... Y pese a la mala imágen que muchos quieren dar de Occidente, es el mundo al que todos quieren venir... y cuando vienen se les trata con todo respeto e igualdad. Los refugiados no quieren ir a otro lugar, aunque sean similares en cultura... No seremos tan malos como nos pintan, repito, con todos nuestros defectos, abusos y consumismo (probablemente el que ha permitido hacer un mundo mejor para todos, pese a todo lo malo que somos capaces de realizar... y todos evolucionan cuando entran por ahí, como China, Rusia o los países deprimidos que solo salen de esas depresiones cuando entran en el malvado mundo del consumismo, que es al que a medio plazo, permite un mundo mejor para la mayoría de los ciudadanos, acabando con miserias y hambrunas, aunque gracias a eso, unos muchos se hagan milmillonarios... Yo prefiero estar mal pagada a no cobrar nada... Como todo, los extremos son malos)... Aunque después de todo lo dicho, estoy totalmente de acuerdo contigo... la violencia genera violencia, pero poner la otra mejilla es algo muy dificil... Creo...
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